Se implementa un operativo interinstitucional que incluye supervisión de carreteras, asistencia a familias y trabajos preventivos ante los efectos de las lluvias.
HERMOSILLO, Sonora.- Ante las intensas precipitaciones que se registraron en diversos municipios de la entidad desde el pasado jueves, el gobernador Alfonso Durazo Montaño puso en marcha un operativo interinstitucional para proteger a la población y atender de manera inmediata las afectaciones por los acumulados de lluvia.
Las acciones fueron coordinadas por la Secretaría de Gobierno que encabeza Adolfo Salazar Razo, la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC), la Brigada Estatal de Manejo de Fuego de la Sagarhpa, Protección Civil Sonora y autoridades de los tres niveles de gobierno.
En Ímuris, como medida preventiva, se tomó la decisión de reubicar la ruta de los peregrinos hacia la carretera ante el desbordamiento del río, priorizando la integridad de las y los asistentes.
Además, se desplegaron brigadas para supervisar tramos estratégicos como Ímuris-Cananea, Ímuris-Nogales, Santa Ana-Magdalena y Magdalena-Tubutama. En estas zonas se atendieron deslaves, cierres temporales y acumulación de agua y rocas.
En Magdalena se realizaron trabajos de desazolve para reducir riesgos de inundación, mientras que en Guaymas se brindó apoyo a 25 familias afectadas y se gestionaron labores de reparación en infraestructura pública dañada, como el Malecón de San Carlos.
Durazo Montaño instruyó mantener comunicación directa con autoridades locales para difundir oportunamente alertas sobre cierres carreteros en municipios como Arizpe, Nogales, Cananea y Yécora.
Además, ayer se trasladaron insumos básicos a las comunidades impactadas y se continuará con la evaluación de daños para definir apoyos adicionales.
